El sello
neoyorquino Pro Latina Press acaba de distribuir en librerías de los Estados
Unidos, así como de ofrecerla a través de Amazon, una compilación en inglés y
castellano de la obra poética del reconocido poeta argentino, considerado por la londinense Ars
Notoria Magazine como una de las voces más destacadas de la poesía
contemporánea de su país y referente del género a nivel latinoamericano.
La vida entera. Una antología/ The Whole Life. An Anthology (*) es la versión bilingüe castellano-inglés de una selección de textos poéticos del argentino Luis Benítez (Buenos Aires, 1956). El sello neoyorquino Pro Latina Press, en 2023, había ofrecido solo el original en castellano, pero por la notable difusión alcanzada entre lectores de poesía la reedita ahora agregando la traducción al inglés.
La versión bilingüe escoge poemas, como la precedente en castellano, de títulos publicados entre 1980 y 2021: Poemas de la tierra y la memoria (1980), Mitologías y La balada de la mujer perdida (1983), Behering y otros poemas (1985), Guerras, epitafios y conversaciones (1989), Fractal (1992), El pasado y las vísperas (1995), La yegua de la noche (2001), La tarde del elefante y otros poemas (2006), Manhattan song. Cinco poemas occidentales (2010), Les Imaginations (2013) y Nadie sabe dónde estuvimos (2021).
La causa de la rápida difusión de la
lectura de esta antología probablemente haya que buscarla a partir de la
seducción del propio título y subtítulo: La vida entera / The
Whole Life. Un sinónimo de entera sería íntegra, cuya
connotación moral es la honradez, un valor altamente deseado en la actualidad.
Además, entera tiene el sentido cuantitativo que enuncia la completitud
de una obra. Bien podría decirse que presenta su obra completa, porque Luis
Benítez empezó a recorrer ciertos caminitos semánticos desde las estrofas de su
primer volumen editado. Son senderos sutiles y precisos, como los que se
internan en las montañas y, al igual que estos, tampoco obvios. Senderos que
entrelazan la naturaleza y sus criaturas con el hombre habitante de las
ciudades, con el infinito del cosmos, con los mitos. La multiplicidad de todos
esos seres está cifrada en un concepto que da título a uno de sus libros
antologados: Fractal (1992). La estructura fractal quebrada, fracturada y
al mismo tiempo proliferante de formas y sujetos. Así sucede en el mundo
natural y, aunque mediante otros recursos, en el discurso social que hablan las
ciudades. Enormes cantidades de sustancias colectivas, simultáneas y en
expansión, están nombradas o sugeridas en varios poemas. En “Poderosas cigarras
del verano” dice que él es “uno de tantos”; en “La mano” dice que “todo es un
infinito pasamanos”. ¿Existe alguna excepción a la multiplicidad
fractal? Probablemente, la salvedad sea “Los ojos de Rimbaud”, aquella
subjetividad salvaje: “De este lado rezamos por ti hincados ante un
lobo”.
El primer paso para adentrarse en
esos vericuetos de lo múltiple Benítez lo da, casi siempre, pisando sobre algo
inesperado dentro de lo cotidiano: un grillo estridulando en pleno invierno
entre las macetas del balcón, o el “infierno” de un subterráneo, o una mujer
maquillándose ante el espejo, o… un elefante caminando por las calles de New
York. Cada animal, planta, personaje, escritor, o ciudad nombrada es una imagen
que nos guía -Virgilio de posguerra- por entre la abundancia y complejidad de
la vida. La madre de los seres múltiples indudablemente es la lengua, en el caso
de Benítez el castellano, al cual le dedica estos versos: “En esta
lengua que hablo
(…) / cuántas voces viven”.
Por ello mismo, la versión al inglés añade otro componente multiplicador
dirigido a la amplia comunidad de habla hispana en Estados Unidos.
La estética supone siempre una ética que la sostiene o, de
lo contrario, solo hallaremos una belleza de cosmética, una pose en el salón de
peinados. Benítez no propone en su poética una moral de “buen comportamiento”,
sino una ética cuyo valor relevante es la aceptación, incluso de “los
bárbaros”: “entender que nada podemos hacer/ Ni por amor ni por odio para redimir a la criatura / De su condición
de bárbara”. Es una visión humanista que en Manhattan song… dialoga
con Erasmo de Rotterdam y en Guerras, epitafios y conversaciones declara
“Un amor absoluto, para el que no existe/ primero ni último,
golpea sobre el mundo:/ en el más humilde y en el más soberbio/ canta la canción
del hombre”.
Eugenia Cabral (**)
Mayo, 2025
(*)Autor: Luis Benítez. Traducción al inglés por
Beatriz Allocati y Araceli Lacore, 305 páginas, edición bilingüe (castellano-
inglés). Pro Latina Press, Nueva York, EE.UU., 2025. Editora: María Amelia
Martin. Diseño gráfico: Álvaro
Dorigo. Imagen de la cubierta: Adriana Gaspar,
ISBN 979-8-218-65975-2.
(**)La escritora argentina Referencias
Eugenia Cabral (Córdoba, 1954), colaboró
en el suplemento cultural del matutino La Voz del Interior (1993-2000).
Es asesora literaria del Teatro La Cochera, junto al director Paco Giménez,
desde 1995 hasta la fecha. Autora del estudio preliminar de Un golpe de
dados, poema de Stéphane Mallarmé, versión en español de Agustín Oscar
Larrauri (Babel Editorial, 2008) y de Prologando la posteridad,
introducción a Del surrealismo a Machupicchu, de Juan Larrea (Instituto
Cervantes, 2019), así como del ensayo Vigilia de un sueño: apuntes sobre
Juan Larrea en Córdoba, Argentina (1956-1980) (Eduvim, 2017). También ha
publicado los poemarios El buscador de soles (Editorial Municipal de
Córdoba, 1986), Iras y fuegos: al margen de los tiempos (Ediciones
Último Reino, 1996), Cielos y barbaries (Alción Editora, 2004), Tabaco
(Babel, 2009), En este nombre y en este cuerpo (Babel, 2012), La
voz más distante (Pan Comido Ediciones, 2016) y La ciudad de amapolas
(Editorial Victoria Ocampo, 2022) y la obra teatral El prado del ganso verde
(2019). Sus textos han obtenido premios y distinciones en Argentina, Venezuela
y España.
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